Detección en áreas abiertas
Las grandes áreas abiertas plantean desafíos únicos a una confiable detección de incendios debido a su naturaleza y limitación ambiental. La detección óptica de humo en áreas abiertas (OSID, por sus siglas en inglés) se ha diseñado específicamente para estos entornos, donde es necesaria la detección y la respuesta temprana para salvar vidas y evitar interrupciones de servicio.
La detección de áreas abiertas utiliza un algoritmo sofisticado para asignar y compara la intensidad de las señales de luz infrarroja (IR) y ultravioleta (UV) desde emisores instalados en el perímetro del ambiente, incluyendo espacios anexos a diferentes alturas.
Los sistemas de detección de áreas abiertas pueden ser configurados para proteger un gran número de espacios, sin limitaciones debido a su forma. La zona de protección o “red de detección” se determina por la situación de cada elemento.
La detección de áreas abiertas combina de manera innovadora dos tecnologías para detectar de manera fiable el humo en espacios grandes que son:
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